En el Santuario de la localidad de Río Blanco una gran cantidad de peregrinos se dio cita para la celebración de la santa misa en honor a los 101 años de la Coronación de la Patrona de Jujuy, Nuestra Señora del Rosario de Río Blanco y Paypaya.
El Vicegobernador Carlos Haquim acompañó al Obispo de la Diócesis de Jujuy monseñor Daniel Fernández, quien junto al Nuncio Apostólico Monseñor Miroslaw Adamczyk, oficiaron la misa. También acompañó en la celebración de la misma, el padre Héctor Barrera, párroco de la iglesia de Río Blanco.
Con el marco de una gran muchedumbre el Obispo de la Diócesis recordó que el Papa Francisco “visitó Jujuy en varias oportunidades, como Monseñor Provincial de los Jesuitas, visitando una comunidad de jesuitas en Yuto, y el padre Bergoglio se quedó en muchas oportunidades para atender a los sacerdotes que ahí viven”. Asimismo, destacó que la presencia del Nuncio “es la presencia del Santo Padre entre nosotros, aquí en este santuario”, y agregó “bienvenido Excelencia al corazón espiritual de Jujuy”.
Por su parte el monseñor Miroslaw Adamczyk, señaló que “la profunda devoción a la Virgen, es una manifestación concreta de esa devoción, y se manifiesta en esta fiesta de los 101 años por la Coronación Pontificia de la Virgen”. Explicó que la coronación se realiza para resaltar la devoción por una advocación Mariana y consiste en la imposición de una corona a la imagen de la Virgen “la veneración hacia la Santa Madre, tiene dignidad real, es reina porque es la madre de Cristo Rey”. Y añadió que para adorar esta “dignidad de María, se estableció la costumbre de decorar con una corona las imágenes de María, como manifestación de gratitud filial”.
Al cierre del oficio religioso, luego de impartir la bendición le pidió al pueblo de Jujuy, “fe, y esperanza porque la pandemia pasará”.
También estuvieron presentes la diputada provincial Mariela Ortiz, el intendente de Palpalá Rubén Eduardo Rivarola, y autoridades comunales